Precalentar el horno a 180 °C con ventilación arriba y abajo.
Engrasar y enharinar cinco moldes de 15 centímetros de diámetro. Si solo dispones de uno o dos moldes, prepararlos de a tandas. Puedes hacer la mezcla de una vez y hornear los bizcochos en dos o tres veces.
Tamizar en un cuenco la harina, la maicena y la levadura química. Reservar.
En otro cuenco, mezclar la leche con el zumo de limón y dejar reposar para lograr un buttermilk casero.
Colocar la mantequilla y el azúcar en el cuenco del robot de cocina y comenzar a batir a velocidad máxima hasta que la mezcla esté blanca y esponjosa.
Incorporar los huevos, uno a uno, batiendo hasta que estén integrados. Incorporar la vainilla y batir un poco más.
Añadir la mitad de la harina y mezclar a velocidad baja.
Incorporar la mitad de la leche (por efecto del limón tendrá grumos, es normal, no tienes que colarla). Cuando la masa sea homogénea, añade el resto de la harina y finalmente el resto de la leche.
Pesa la masa y repártela equitativamente entre 5 cuencos para teñir las masas con el color que más te guste, para hacer un arcoíris te proponemos color rojo, amarillo, azul, verde y violeta.
Para saber cómo lograr los colores utiliza nuestra guía de colorantes alimentarios Dr. Oetker: https://www.oetker.es/nuestras-recetas/p/colorantes-alimentarios
Una vez tengas las masas coloreadas, llenar uno de los moldes engrasado con un color. Repetir con todos los colores.
Hornear cada capa de bizcocho durante 25-30 minutos a 180 °C. Procura hornearlos en el mismo nivel del horno, así que tendrás que hornear en 2 o 3 veces.
Los bizcochos están listos cuando los bordes se separan ligeramente del molde y al introducir un palillo salga limpio.
Desmoldar cuando el molde esté templado al tacto y dejar enfriar por completo sobre una rejilla.
Colocar las claras y el azúcar en un cuenco y llevarlas a baño maría. Remover con varillas normales hasta que la mezcla alcance 74 °C (sin termómetro lo sabrás porque puedes tocarlo con los dedos y ver que el azúcar esté totalmente disuelto). Por seguridad, recomiendo usar termómetro y vigilar que llegue a 74º.
Pasar esta mezcla a un bol y montar a punto de nieve.
Intormorar la mantequilla y finalmente la vainilla.
Igualamos los bizcochos, cubrimos el primero con la buttercream y colocamos el siguiente encima. Repetimos el proceso hasta tener las 5 capas de bizcocho. Con la ayuda de una espátula, decoramos la parte exterior del pastel con la buttercream para conseguir cubrirla por completo. Puedes hacer florecitas o copos con el sobrante de la buttercream para decorar el pastel por encima.
Como toque final, espolvorea el Sprinkles Rainbow Mix de Dr. Oetker, coloca las velas ¡y a disfrutar!
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