Dejar atemperar el helado durante 20’ fuera del congelador y hacer 12 bolitas de helado con la ayuda de una cuchara.

Colocar las bolitas de helado dentro de las cápsulas de muffins y llevar inmediatamente al congelador, al menos durante 1 hora.

Preparar una bandeja con papel vegetal y espolvorear con abundante almidón de maíz tamizado.

Colocar en un cazo el agua, el azúcar, el aroma de vainilla y el aceite.

Añadir unas gotitas de Colorante Alimentario Dr. Oetker para crear el color que más te guste.

Calentar a fuego bajo hasta que el azúcar se haya disuelto por completo y el agua esté caliente.

Añadir en tres partes la harina de arroz glutinoso, mezclando siempre con varillas para disolver los grumos.

Pasarse a una espátula y continuar cocinando la masa hasta que esté espesa. La masa estará pegajosa, pero al enfriarse será suave y elástica.

Verter la mezcla de mochi caliente sobre la bandeja con almidón de maíz y espolvorear con más almidón de maíz por encima.

Estirar la masa con la ayuda de un rodillo de cocina hasta que tenga unos 4 mm de espesor.

Tapar la masa con papel film para que no se seque y llevar a la nevera al menos 20’ hasta que esté fría.

Retirar la masa fría de la nevera y cortar círculos con la ayuda de un cortador o un vaso que sea el doble del diámetro de las bolitas de helado.

Coger un círculo de masa de mochi y colocarlo en la palma de la mano.

Retirar una bolita de helado a la vez y colocarlas en el centro del círculo de masa.

Sin tocar el helado para que no se derrita, comenzar a cerrar el mochi, juntando las puntas en el centro, presionando para cerrarlo bien.

Colocar el mochi en una nueva cápsula de papel con el cierre hacia abajo y guardar en el congelador.

Repetir este paso con todos los mochis.

Puedes juntar el resto de masa y volverla a estirar para hacer más mochis.

Espolvorear los mochis con almidón de maíz y guardarlos en el congelador hasta el momento de servir.

Dejar atemperar los mochis 5’ fuera del congelador antes de servir.