Agitar bien el frasco para que el contenido se desprenda del fondo. 

Añadir 400 ml de leche (hasta la marca), cerrar bien y agitar durante aprox. 1 minuto. Verificar que el polvo se haya desprendido completamente del fondo. 

En una sartén, calentar la mantequilla. 

Verter una taza pequeña (de café) de la mezcla preparada y repartir uniformemente en la sartén. Cuando el crepe esté dorado por un lado, darle la vuelta con la ayuda de una espátula. Dejarlo unos segundos más hasta que esté listo. 

Retirar y mantener en un plato con una tapa de sartén para mantener el calor. (o en el horno, a temperatura mínima, 50°C). 

Lavar las espinacas y escurrirlas. 

Cortar los tomates en rodajitas. 

Eliminar la parte más dura de los tallos de espárrago y cortarlos en 3 ó 4 trozos. 

Pelar el ajo y picarlo. 

Calentar el aceite en una sartén, introducir los espárragos y saltear hasta que estén suaves. 

Añadir los tomates, el ajo y las espinacas. Saltear durante un minuto más y salpimentar.

Verter un poco de la mezcla de espárragos espinacas y tomate sobre los crepes, añadir queso de cabra desmenuzado y unas almendras en láminas y enrollar. Servir caliente.

Añadir unas tiritas de beicon o de jamón a la receta para convertirla en un plato más completo. 
Cuando quieras preparar menos de 4 platos, conservar el frasco con la mezcla reconstituida en la nevera durante 24 horas como máximo. Agitarlo bien antes de usar.