Precalentar el horno: Eléctrico 240°C (arriba y abajo) • Ventilación 220°C • Gas: posición 5 

Sumergir la bolsa de aluminio en agua hirviendo durante aprox. 10 minutos. 

Engrasar los moldes de aluminio con mantequilla o margarina y espolvorear con una pizca de harina.

Abrir la vaina de vainilla a lo largo, retirar las semillas del interior e introducirlas junto con las vainas en un cazo con la leche. 

Llevar a ebullición, retirar del fuego y verter sobre las yemas batidas con el azúcar. 

Volver a introducir en un cazo y cocer a fuego suave sin dejar de remover hasta que espese ligeramente. 

Dejar entibiar removiendo de vez en cuando.

Con una batidora con varillas batir la mezcla preparada con los huevos durante 2 minutos a velocidad alta hasta obtener una masa homogénea. 

Añadir el contenido (ahora líquido) de la bolsa de aluminio a la masa y mezclar bien. 

Verter la masa en los 4 moldes. 

Añadir 1 cucharada de crocanti en el centro de cada molde y presionar con la cuchara para que se introduzca por el medio.

Agregar la nata a la mezcla anterior, remover y dejar que se enfríe por completo. 

Introducir la mezcla en la heladera y proceder a helarlo siguiendo las instrucciones del aparato. 

Si no se dispone de heladera, verter la mezcla en un recipiente plano y metálico, llevar al congelador y remover cada media hora durante tres horas para romper los cristales de hielo que se van formando. 

Al final, verter en un contenedor y reservar en el congelador hasta el momento de utilizarlo.

Hornear en la parte central (en los hornos de gas en la parte superior) durante 8 minutos. 

No abrir la puerta del horno durante el horneado.

Después de hornear dejar reposar 10 minutos y desmoldar.

Servir en plato acompañado del helado, sirope de chocolate y algunos pétalos de rosa.